viernes, 27 de agosto de 2010

Patatas al horno solar.

Patatas enteras asadas en cocina solar.



Vamos a hornear una patatas en nuestra cocina solar parabólica. No es un horno solar lo que utilizamos, sino una olla de hierro esmaltado negro en una Alsol 1.4   Para ello compramos 3 kilogramos de patatas medianas de la variedad que más nos guste. Las blancas se deshacen más, las rojas quedan más enteras.  La cantidad que aquí menciono es para 10 personas. 

Lavamos bien las papas sin pelar bajo el grifo con un cepillo o esponja, sin romper la piel, pero procurando que no quede tierra.  Las colocamos en la olla y ésta encima  de la cocina solar.














Como se puede apreciar, la temperatura en la olla es más que suficiente para convertir su interior en un estupendo horno de convección.  Con más de 250 grados centígrados está a la altura de cualquier horno eléctrico o de gas.  Las patatas necesitan poco más de una hora con cielo despejado, dos con cielo velado, para estar hechas.  Para que no se quemen, conviene remover la olla cada 15 minutos para que las patatas se muevan y girarla 180 grados. CUIDADO, USAR MANOPLAS. 






Las patatas se pueden consumir con o sin  la piel, partidas en trozos con aceite y sal, riquísimas!  




lunes, 23 de agosto de 2010

Carrillada solar de Cerdo

Carrillada o Carrillera de cerdo en cocina solar. 


La carrillada de cerdo es una carne muy especial de ese animal tan provechoso para el ser humano, siempre que no seamos musulmanes creyentes. Normalmente debemos pedirla por encargo e indicar a nuestro carnicero cuántas piezas queremos que nos traiga, calculando de dos a tres por persona adulta, dependiendo del hambre que tengan. 
Las carrilladas se preparan como guiso, en un lecho de verduras al gusto. Hay recetas muy interesantes que proponen la naranja como acompañante.   Aquí voy a proponeros una receta de sabor clásico e infalible, que es guisar la carne con abundante cebolla y algunas zanahorias, todo ello bañado en vino blanco seco, en una segunda fase de la cocción en nuestra cocina solar parabólica. Para que nos quede jugosa y suave, debemos cocinarla durante más de dos horas, procurando que no se nos deshidrate ni queme si el cielo está muy raso.  Todo lo demás es muy sencillo.

INGREDIENTES  (Para 10 personas):

20 piezas de carrillada de cerdo blanco.
2 Cebollas medianas.
4 zanahorias medianas.
Media botella de vino blanco de mesa seco.
Un vasito de aceite de oliva virgen extra.
Dos hojas de laurel y opcionalmente orégano y/o clavo. 
Sal y pimienta a gusto.

Cacharro: olla negra de hierro colado de 5 litros de IKEA - 40,00 euros. Ya no está en catálogo.
Tiempo total de preparación: 3 horas
Dificultad: media
Coste: 25,00 euros (2,5 euros por persona) 





En primer lugar lavamos la carne bajo el grifo en un gran colador y le quitamos con un cuchillo bien afilado (el de la foto es de cerámica blanca) la piel y grasa que puedan quedar en uno de los lados de las piezas.  Pelamos las cebollas y zanahorias y las cortamos en trozos pequeños. Una vez seca la carne, la colocamos pieza por pieza en la olla de hierro colado o en una olla de hierro esmaltado. 



Añadimos las verduras, dos hojas de laurel, dos pellizcos buenos de sal gorda y algo de pimienta y un vasito de aceite de oliva virgen extra.  Y colocamos la olla tapada en la cocina solar, previamente orientada como he explicado en entradas anteriores de este blog. 



El cielo estaba bastante azul, de modo que tuve buen cuidado de girar la olla cada 15 minutos durante la primera hora, hasta que le añadí el vino blanco. En total estuvo la carne 2 horas y media.  Cada media hora hay que remover con mucho cuidado el guiso, con una cuchara ancha de madera. La salsa es una delicia y queda ligeramente espesa por sí misma.  Acompañé el guiso con patatas enteras sin pelar. En el siguiente post os pondré cómo hacerlas al horno en una cocina solar parabólica.   

La carne a medio hacer para echarle el vino. 


Y el plato listo para servir.  Las carrilladas se reducen a la mitad cuando están hechas. La carne se debe de poder cortar casi con el tenedor, pero ha de estar entera.  

De lo mejor del cerdo.  ¡Que aproveche!




domingo, 8 de agosto de 2010

Sopa de Rape solar

Sopa ligera de rape en cocina solar. 


Esta es una receta sencilla que nos permite hacer un caldo a base de rape y pescado variado, acompañados de unas verduritas que elevan el aroma de nuestra sopa a una sinfonía de moléculas estimulantes que penetran en nuestro cerebro con promesas de placer y vigor.  En otras palabras: desde el momento en el que acercamos la nariz a un buen caldo de pescado, sus efluvios nos activan las glándulas digestivas desde la boca hasta el estómago.  Y es ideal para niños y convalecientes que necesitan un alimento sencillo y rico a la vez.  Una vez hecho el caldo, lo colamos y lo refrigeramos o congelamos en dosis cómodas que nos permiten hacer una sopa de fideos, una paella marinera o simplemente tomarnos un par de tazas con unas gotas de limón. 

INGREDIENTES:  para 2 litros de caldo. 

1 kilogramo de pescado variado con un 50% de rapes. Esto es algo que nos puede tocar en suerte o en el peor de los casos debemos comprar un rape mediano o medio rape grande, pero así nos sale más caro. 
2 ramas de apio, lavado y cortado.
1 puerro, lavado y cortado. 
1 Tomate maduro (opcional).
5 clavos.
1 buen puñado de sal marina.
3 litros de agua mineral o purificada. 


Tiempo total de preparación: 2 horas, 90-100 minutos de cocción en cocina solar con cielo despejado, 2 horas a dos horas y media con cielo velado.



Lavamos el pescado y los muy hábiles pueden incluso limpiar las piezas más grandes por dentro. Echamos todos los ingredientes en una olla de hierro esmaltado negra, las hay de 3,5 y 12 litros en BIOHABITAT, por ejemplo. Pero en cualquier ferretería debe ser posible encontrar la tradicional olla esmaltada sin asas de plástico, muy importante, para que el Sol nos nos queme esas partes.  Recordar que al cocinar en una cocina solar, debemos usar cacharros negros o oscuros, tal y como explico en el post de la herramientas del chef solar. Ver entradas antiguas.

Colocamos la olla en nuestra cocina solar parabólica  alsol 1.4 y la orientamos al flujo incesante de fotones que el astro rey lanza generosamente en estas latitudes y fechas a la Tierra. 




Y al cabo de 90 minutos tenemos 2 litros netos de caldo riquísimo de rape. 

jueves, 5 de agosto de 2010

Tomate frito casero solar.

Salsa de tomate con hortalizas en cocina solar. 

No me canso de repetirlo: para cocinar con una cocina solar, los cielos ligeramente velados, sobre todo en verano, pueden ser nuestro mejor aliado para una cocción sin peligro de quemar nuestra comida. El que ha conocido la extraordinaria potencia de la cocina solar parabólica alsol 1.4, sabe que nos puede jugar una mala pasada si nos despistamos con cielos muy nítidos y con el astro rey en ángulos muy verticales, sobre todo por las paredes de la olla, que en ocasiones se calientan más que el fondo y alcanzan hasta 300ºC.  También debemos cuidar de no chamuscar nuestro alimento si usamos tapas de vidrio, ya que hay rayos que se cuelan por arriba y hacen un efecto lupa que puede producir quemazones negros en carnes y todo lo que no esté bajo el agua en la olla. 

Por eso un cielo levemente velado, que deja al Sol con el 80-90% de su potencia máxima, no debe desalentarnos a guisar bajo el Sol sin emisiones, sino todo lo contrario, pues nos permite trabajar con temperaturas ideales para guisos y verduras. De todos modos, con una adecuada vigilancia y ajustes del parabol, a ningún chef solar se le debe quemar nada. 

Estamos en pleno verano y ahora el mercado nos surte de hortalizas a precios muy interesantes. Compré esta semana unos kilos de tomates de pera a 1 euro y con tanto tomate en casa he decidido hacer una salsa de tomate frito enriquecida al estilo hortelano.

INGREDIENTES

Todo bien troceado:  2 kilos de tomates muy maduros de pera, se cortan en cuartos, se dejan con piel, luego los trituramos bien con una batidora y no queda nada, así aprovechamos toda la fibra de la piel.  1 cebolla grande, blanca.  2 dientes de ajo. 1 Zanahoria grande en rodajas.  1 vasito de aceite de oliva virgen extra. Un buen puñado de sal marina.  Una rama de orégano.   1 vaso de agua ( se añade a mitad de cocción, para que los inredientes se hagan primero como un sofrito, y sirve para compensar la deshidratación, porporcionando una salsa más ligera).


Se echa todo en una olla negra de hierro esmaltado.  Y se coloca en la cocina solar.  Se revisa y ajusta la cocina y se gira la olla 180º cada 20 minutos. Tiempo total de cocción, 75 minutos. 


Por la sombra en el suelo se puede apreciar que la cocina está correctamente alineada con los rayos solares.


Las llamas solares abrazan toda la olla por abajo.


Para manipular el alimento sin que el Sol nos deslumbre, usamos la cocina solar de pantalla.



Así queda el guiso al cabo de una hora, en plena ebullición y casi listo.  Podemos hacer hasta 4 litros de salsa con una sola olla, con 5 kg de tomates. La cocina solar puede con cantidades realmente respetables. El tiempo de cocción sería de 2 horas a 2 horas y media para esa cantidad. Removemos de vez en cuando con una cuchara de madera y giramos la olla en la cocina 180 grados para exponer las paredes al lado de los rayos de forma equilibrada, evitando así que en un lado se nos pegue caldo quemado. 



Y así nos queda la salsa ya pasada por la batidora hasta que esté fina. No queda ni un  trozo de piel a la vista.  El color anaranjado es por la cebolla y la zanahoria. Los tomates fritos industriales corrigen ese efecto con colorantes, pero no hay nada como lo natural.  Y podemos meter la salsa que nos sobra en el congelador o hacer envasados en tarros, al baño María, también en nuestra cocina solar, por su puesto!